Ese mismo año lo que parecía ser una carrera prometedora del cine comercial se convertiría en pesadilla. Landis participó en la película coral En los Límites de la Realidad (The Twilight Zone, 1983) homenaje al mítico programa de si-fi de los años 50. John cumplió la ardua tarea de hacer el capítulo más aburrido de los cuatro de la película (cosa difícil teniendo en cuenta que participaba el ñoño de Spielberg). Durante el rodaje de una escena bélica de su capítulo, la explosión de un helicóptero produjo la muerte del actor protagonista Vic Morrow, y de dos niños de seis y siete años que habían sido contratados de forma ilegal por Landis. La falta de seguridad a la hora de rodar la escena hizo que Landis fuera acusado de "homicidio involuntario". Cinco años después, y en un juicio amañado por los grandes estudios, Landis fue absuelto. En el proceso de esos cinco años gran parte de la industria retiró su apoyo incondicional al director. Brian de Palma dijo que no se podía utilizar para esa clase de escenas a gente que no era especialista, y mucho menos a niños.
Aunque el juicio sirvió para que se incrementaran las medidas de seguridad en los rodajes de Hollywood, la carrera de Landis se vio resentida. Antes del juicio continuó su racha de nefastas películas con Cuando Cae la Noche (Into the Night, 1985, sólo destacable por una pelea a cuchillo entre Carl Perkins y David Bowie), Espías como Nosotros (Spies Like Us, 1985), Tres Amigos (¡Three Amigos!, 1986) y los episodios más nefastos del film coral Amazon Women in the Moon (1987), pero tras el juicio se vio relegado a hacer capítulos de Disneylandia (se ve que matar dos niños es la mejor manera de entrar en el reino de Mickey Mouse) hasta que en 1991 realizó una nueva versión de la película francesa Oscar cambiando a Louis de Funès por ¡Silvester Stallone! Después Landis se ha debatido entre episodios televisivos y películas tan nefastas como Superdetective en Hollywood III. Dicho todo esto, no sabemos si lo peor de invitar a Landis a cenar sería aguantar su barato sentido del humor o los tres fantasmas de los que iría acompañado.
1 comentario:
Me parece que te has pasado un poquito con John. Además, no mencionas para nada a Spielberg, que también era co-productor de la peli y se quitó de en medio sin mancharse los zapatos cuando también debería haber estado sentado en el banquillo. El único que dió la cara en el juicio fue Landis. Mi opinión es que fue un desgraciado accidente que prácticamente acabó con la prometedora carrera del que podría haberse convertido en uno de los más grandes directores de comedia.
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